"Pase lo que pase, sea lo que sea y digan lo que digan, incluso a efecto de publicación, lo más importante es escribir lo que tú quieres escribir como lo quieras escribir. En mi caso el obejtivo no era la editorial sino no echarme en cara, avergonzarme al final de no haber retribuido, a mi escala, lo bueno y malo que me rozó la vida. Para bien o para mal, no se sabe, cuando más volátil e inhaprensiva es la vida, cuanto menos la entiendas y más disgustos te da, más te relacionas con la "verdadera" vida, aquélla que no has pasado entre algodones. Todo. Absolutamente todo lo que escribes lo has vivido antes, has sido antes tú. Nada se escribe, aunque en apariencia nada tenga que ver contigo, sin que hayas estado presente en ello, estás presente en el acto de dilucidar la forma definitiva por el que transcurre el hecho. Naturalmente, nada de esto tiene importancia si el que escribe es un genio y pasa por encima de toda contingencia."